Hace
unos años estuvimos en el norte del país, más exactamente en
Tucumán. Hemos estado en Raco y visitado Siambón, El Cadillal, Villa Nogues,
San Javier, Yerba Buena, San Pedro de Colalao.
En esta edición me voy a referir concretamente al encantador pueblito de
Raco, un sereno paisaje campestre entre los microclimas de Tucumán. Tierra
donde viviera Atahualpa Yupanqui. Raco conserva las puras tradiciones
pastoriles en un marco de atractivas serranías y montes.
Como
llegamos: ¿dónde está ubicado este pueblito?
Al llegar a Tucumàn, seguimos camino a Salta por Ruta 9, y al llegar a
Tapia tomamos a la izquierda por la Ruta 341, después de transitar unos 30 Km
pasando por Tapia, Las Tipas, Sauce Yacu llegamos a Raco y luego El Siambon. De
Tucumán, capital, son 50 Km. Este pequeño poblado está a unos 1300 metros de
altura sobre el nivel del mar.
En
este bello conjunto de campo y sierra, un rincón perfumado por aromas
pastoriles que el maestro Atahualpa Yupanqui, eligió para radicarse y crear
hermosas zambas que pudieran alabar tanta belleza al pie de las sierras
subandinas. Entre ellas La Raqueña, zamba que interpreto e hice la transcrpcion para guitarra y que Ariel Ramirez grabó en 1966. Según es la
zamba considerada más importante porque está dedicada a Raco. Uno de sus versos dice:
En mi pago de Raco / Y en el campo de la zanja
Cuando se siembran penas /
Se cosechan esperanza.
El
campo de la zanja es un hermoso lugar arbolado. El camino es una hondonada,
baja y sube abruptamente, por eso, eso
de zanja, hoy cubre parte de ese lugar
El Siambon Country Club,-lugar donde estábamos parando-, con su apart
hotel, que lleva el nombre Atahualpa, en homenaje a Yupanqui, restaurant,
canchas de golf, tenis, paddle.
El estribillo dice :
En el corral de pircas /
zumba mi lazo
Así me zumba el alma /
viditay cuando te abrazo.
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